Las bolsas de celofán se fabrican con celofán transparente con alto brillo y no llevan ningún tipo de impresión, por lo que son aptas para múltiples usos. Las bolsas se pueden cerrar con una selladora manual y tienen un fuelle lateral a ambos lados de la bolsa.
El celofán es resistente al agua y al aire, pero no es adecuado para productos que necesiten protección contra la humedad o el oxígeno durante períodos prolongados. Por lo tanto, se utiliza principalmente para envases que no requieren una barrera significativa contra elementos externos.
Materiales compostables de origen vegetal
Las bolsas de celofán son un tipo de envase fabricado con celofán, que es un material transparente y delgado hecho de celulosa regenerada, generalmente derivada de pulpa de madera. El celofán es conocido por su alta transparencia y brillo, lo que permite que el contenido de la bolsa sea claramente visible
Los materiales utilizados en la confección de la bolsa son biodegradables y compostables de origen vegetal. Una vez utilizada la bolsa, se desecha en el contenedor marrón o de restos orgánicos, donde más tarde el material se procesa en una planta de compostaje industrial para convertirse en compost o abono natural.
Apto para contacto con alimentos

¿Cuáles son sus ventajas?
Transparencia: La principal ventaja de las bolsas de celofán es su alta transparencia y brillo, lo que permite que el contenido sea claramente visible. Esto es especialmente beneficioso para productos que necesitan exhibirse o mostrarse de manera atractiva.
Presentación atractiva: La transparencia del celofán realza la presentación del producto, lo que lo hace atractivo para los consumidores y mejora su percepción de calidad.
Ligereza y flexibilidad: Las bolsas de celofán son ligeras y flexibles, lo que las hace adecuadas para envasar artículos de diferentes formas y tamaños.
Resistencia: Aunque son delgadas, las bolsas de celofán son lo suficientemente resistentes para proteger productos pequeños de arañazos, polvo y manipulación durante su transporte y almacenamiento.
Fácil de sellar: El celofán se puede sellar fácilmente mediante calor o con cintas adhesivas, lo que facilita el proceso de empaque.
Versatilidad: Las bolsas de celofán son adecuadas para una amplia gama de productos, como regalos, dulces, galletas, cartas, tarjetas y otros artículos pequeños.
Biodegradabilidad: Aunque el celofán tradicional estaba hecho de celulosa regenerada, que es biodegradable, es importante mencionar que muchas bolsas de "celofán" modernas están hechas de materiales plásticos que pueden ser reciclables o biodegradables.
Costo: Comparadas con otros tipos de envases más complejos, las bolsas de celofán tienden a ser más económicas, lo que las convierte en una opción rentable para el envasado de productos.

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